Hay ocasiones en las que el trabajo diario nos permite tener entre manos objetos curiosos, como el que ocupa el trabajo que desarrollamos en ésta entrada.
Nos vino a visitar un caballero que tenía una máquina de fotografiar del siglo XIX, que según nos dijo era un daguerrotipo, el antecedente de las verdaderas máquinas fotográficas. Éste artilugio fijaba la imagen en unas placas de cristal mediante líquidos y vapores, placas de cristal que se guardaban - y ahí es donde intervenimos nosotros - es unas cajitas de madera con ranuras hechas a propósito para guardar varias placas como las descritas. El caso es que las cajas de madera originales estaban muy deterioradas, y para completar la restauración el cliente nos pidió que le hiciésemos una tapa y dos laterales ranurados, exactamente iguales a los originales, en madera de cerezo.
Era un trabajo en el que intervino una mecanización de madera en taller, para obtener las planchas de cerezo de las medidas y el espesor requeridos, y un trabajo de fresado de gran exactitud en el pantógrafo, fresando por control numérico ambas piezas. Para dar una idea del tamaño de las piezas y de la dificultad del fresado, hicimos unas fotos del trabajo junto a una moneda de 1€ para que sirviese de referencia.
Era un trabajo en el que intervino una mecanización de madera en taller, para obtener las planchas de cerezo de las medidas y el espesor requeridos, y un trabajo de fresado de gran exactitud en el pantógrafo, fresando por control numérico ambas piezas. Para dar una idea del tamaño de las piezas y de la dificultad del fresado, hicimos unas fotos del trabajo junto a una moneda de 1€ para que sirviese de referencia.
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